Entrenar con calor.
Éstamos en pleno verano, el calor aprieta y tenemos que tomar una serie de precauciones, si queremos rendir al máximo en nuestros entrenamientos.
La hidratación es un punto clave para todo deportista. En la práctica deportiva una de las consecuencias más directas que tenemos, es el aumento de temperatura corporal, debido al esfuerzo y al gasto energético.
Es mediante la pérdida de líquido implicada en el proceso de sudoración, que nuestro cuerpo regulará la temperatura. Esto no solo conlleva la pérdida de líquido, sino que también de sales minerales, y electrolitos.
Por ello debemos tener especial precaución a llevar a cabo una buena hidratación antes, durante y después del entrenamiento, ya que la mayoría de veces que el cuerpo se encuentra en estas condiciones y aparece la sed, el proceso de deshidratación ya está teniendo lugar.
Aporta con agua i/o bebidas isotónicas todo aquello que el cuerpo necesita para mantenerse bien hidratado en todo momento. Y no olvides que no únicamente bebiendo,, podemos hidratarnos, ya que encontraremos también en diferentes vegetales y frutas en especial, un gran aporte del líquido que necesitamos.
Elige bien tu indumentaria.
Todos sabemos que en el mercado hay todo tipo de prendas deportivas. Y que además de poder ser más o menos técnicas, solemos comprar aquellas que nos gustan.
Es un buen momento para elegir de entre aquella ropa que quiero comprar, o la que tengo en casa, aquella que es más adecuada. Si el calor aprieta, lo último que queremos en un entrenamiento es llevar ropa que nos pese, sea muy agobiante, o transpire poco. Por ello, nuestra elección debería ser intentar buscar la ropa más ligera y transpirable que podamos.
Elige bien la hora a la que entrenas y cuida tu intensidad.
Si queremos sacar el máximo rendimiento a nuestro entreno, debemos sacar el máximo rendimiento a las horas de nuestro día. Eso significa que, si entrenamos al aire libre, siempre será mucho mejor hacerlo en aquellas horas en las que hay menos luz. La intensidad a la que entrenamos también determinará la calidad del entrenamiento, por lo que en franjas de mucho calor es preferible que bajes un poco la intensidad, para que de ese modo la recuperación se lleve a cabo más rápidamente.
Aprovecha la tecnología de nuestras máquinas cardiovasculares.
Sal a correr sin moverte del gimnasio. Hemos incorporado en nuestros centros, máquinas cardiovasculares con un gran aporte tecnológico. No solo en cuánto a entretenimiento se refiere, si no en cuánto a modalidades y posibilidades de ejecución se refiere. Elige una de nuestras máquinas, línkate con tu usuario y corre por Nepal, Estambul o Berlín, en unas condiciones óptimas para tu entreno sin padecer calor alguno.
Protégete si decides salir fuera.
Si la idea de correr al aire libre es más tentadora que la de usar la tecnología que te ofrecen nuestras máquinas, protégete bien del sol. Usa un buen protector solar, gorra y gafas. Tu cuerpo lo agradecerá hoy y tu piel en un futuro.
Descansa adecuadamente
A la hora de llevar a cabo nuestro entrenamiento vamos a someter a estrés toda aquella musculatura que impliquemos en él. Romper estructuras es una de las consecuencias de nuestra práctica y es mediante una buena alimentación que aporte los nutrientes necesarios para la recuperación y mediante el descanso que conseguiremos evolucionar con cada entreno. Pues sin una buena recuperación y sin descanso, el entreno deja de ser cualitativo.
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